Qué os voy a contar de la sopa de picadillo. Pues que todos tenemos el recuerdo de nuestras madres, el olor que llenaba toda la casa y salía a empujones a recibirnos cuando llegábamos del colegio y la sensación de seguridad que daba sentarse a la mesa y comerla en compañía, en mi caso, de un montón de hijos (somos 7), mi querido padre y mi amada madre.
Mi hermana Chica, mi Antonia, ha heredado exactamente el mismo punto de mi madre en sus comidas. A mí me ha costado hacer una buena sopa muchos años, y aún hoy, depende del día, me sigue saliendo regulín. Y me da un corajeeeee!!!!!
Os pondré la receta de mi madre y mi hermana Antonia. Yo, de vez en cuando le añado mi punto como hoy, poniéndole un poco de hierbabuena.
INGREDIENTES:
Alitas de pollo
Un trozo de tocino añejo o hueso de jamón
1 tomate
Ajos enteros sin pelar rajados por la mitad
Bola verde (pimiento verde alargado)
Puerro
Zanahoria
1-2 patatas.
1 huevo cocido por comensal
Sal
PREPARACIÓN:
Todo en crudo, en una buena olla con agua, a cocer durante el tiempo que queramos. Mientras más tiempo esté, mejor estará.
Si usáis el hueso de jamón, desalarlo antes un poco.
Para presentarlo, cortamos la carne de las alitas de pollo muy pequeña, cocemos en un cazo aparte y con un poco del caldo, unos fideos cabello de ángel, colamos el caldo. Unimos el caldo con los fideos y la carne y picamos o ponemos el huevo cocido como queramos presentarlo.
Qué bonito ser madre y tita....
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