domingo, 13 de noviembre de 2016

SOPA DE CEBOLLA



Hubo un tiempo de mi vida en el que trabajé en un lugar donde se suponía que el glamour, la elegancia y el buen tipo debía ser seña de identidad de la empresa. Claro que todos carecíamos de alguna de las premisas y alguno de todas. De ahí el encaje difícil. Muy difícil; como el encaje de bolillos. Las ideologías casi siempre van unidas, queramos o no, a nuestra ropa, nuestros zapatos, nuestro pelo y hasta nuestra forma de andar. La elegancia, se nace con ella o es imposible aprenderla. También es cierto que lo que yo creía entonces que era la elegancia, poco o nada tiene que ver con lo que opino ahora.

Ya sabéis, de cada experiencia hay que sacar lo mejor. Una de las cosas que me traje de allí fue esta receta que me regaló mi compañera Vicky. Otra, la más importante, el cariño de mi niña Fátima. Una flor llena de vida con una sonrisa que disimula muy bien sus días malos y unos ojos que siempre te están diciendo que está ahí para lo que necesites. 

INGREDIENTES:

Pan del día anterior
1 litro de caldo de verduras o de pollo
1 ó 2 ajos
3 cebollas grandes
Sal
Aceite de oliva virgen

PREPARACIÓN:


En una sartén ponemos cuatro cucharadas de aceite y echamos las cebollas cortadas en juliana. Rehogamos bien para que quede lo suficientemente blanda pero sin que se caramelicen. Ya sabéis que la cebolla a fuego lento y con tiempo acaba caramelizada.

Si no tenemos el caldo preparado de otro día, ponemos agua a cocer en una olla y le añadimos una zanahoria, media cebolla, dos dientes de ajo, un poco de apio, un puerro y una patata. Si queremos le añadimos unos trozos de pollo. Llevamos a ebullición y dejamos al menos media hora o cuarenta minutos cociendo.

Ponemos el pan hecho rebanadas en el horno a tostar y cuando esté listo, lo sacamos y le restregamos un diente de ajo pelado. 

En una bandeja de horno ponemos una capa de pan, añadimos otra capa de cebolla, mojamos con el caldo y así sucesivamente hasta que lleguemos al borde de la bandeja. Espolvoreamos con queso rallado y al horno a gratinar unos minutos a vuestro gusto.

Hay muchas formas de hacer la sopa de cebolla. Otro día os pongo otra receta, pero esta es muy socorrida y fácil de hacer.



Aquí trabajé yo durante algunos añitos. Yo no soy esa, ehhhh (jajajajaja)


No hay comentarios:

Publicar un comentario